Toda suerte de prodigios
¡Oh, la luz! - Escapril 2024, día 12.
El sol estalla en mis retinas
en un resplandor que rompe la negrura
como unos nudillos contra un espejo,
y los pedazos de la agonía
reflejan la luz en cientos de agujas
que tejen en punto de cruz hacia dentro
de mis sobresaturadas pupilas.
Nadie te advierte del miedo,
de los sudores fríos y los temblores
del mancillado cuerpo.
Nadie te advierte de los horrores
luminosos que trae el lucero
cuando tras tanto tiempo conoces,
al salir de lo oscuro, el color verdadero.
Y tampoco nadie te advierte
de que, una vez atrás el chasquido
inicial, las pupilas adaptadas al verde,
al azul, al blanco de pronto tan temido,
puedes sentarte a practicar los ritos,
hundir tu cayado en las aguas
y separar el pasado del presente.
(Fuente de la imagen: DyE - Fantasy).
Comentarios
Publicar un comentario